sábado, 13 de enero de 2018

“Contate un cuento X” Mención de Honor Categoría A Lodovico Martínez: el niño pasado, presente, futuro. Por Maia Pontaroli, alumna de 2º año del Instituto Gral M. Rodriguez de Tandil

        ¡Hola! Me presento, soy Lodovico, un niño con capacidades especiales. Nací el 17 de febrero en 1010. Era un campesino de diez años, ayudaba a mis papás y hermanos. Un día, me quedé dormido a la luz de las estrellas. Cosa que no me arrepiento de haberla hecho. Esa noche, cayó un rayo en mi frente, y no, no  morí. Al otro día amanecí, pero en un lugar desconocido. Había luz, una cosa rara llamada celular, que ahora es fundamental en mi vida. Había un lugar en donde enseñaban las cosas del pasado y presente, llamada escuela. También había autos, televisión, camas, baños, comida extraña. Aprendí muchas cosas. Mi familia seguía siendo la misma.
En el futuro, viví quince años. Me gradué en la secundaria de Beverly Hills. Después estudié historia y ahora tengo treinta años. Ustedes se preguntarán cómo tengo treinta, los números no les dan. Esto tiene una explicación.
Un día, hablando con mi novia Mara se oyó un ruido en mi cocina. Se había roto un caño de agua y se inundó toda la casa. Yo me desmayé en el agua. Cuando desperté nuevamente, mis padres y hermanos vestían atuendos cavernícolas. Me llamó la atención que ya no tuviera ni mi casa, ni mi auto y mi novia tampoco estaba. Me dí cuenta que estaba en el pasado. Gracias a mí, mi familia  aprendió a cocinar, comunicarse, prender fuego, pudimos armar un celular y un televisor.
Vivíamos en una piedra, pero hice una casa de ladrillos y cemento. Diseñé ropa más adecuada, camperas y zapatillas. Ahora el pasado ya no era pasado sino que era “pasaturo” (Pasado y futuro).
Un día soleado, me asfixié del calor y me electrocuté con un rayo ultravioleta. No sé cómo porque estaba la capa de ozono pero aún así pasó. Cuando desperté, tenía diez años de nuevo. Estaba en mi presente, estaba mi madre y hermanos trabajando en el campo. Amanecí en el mismo lugar donde me cayó el rayo, cosa muy curiosa. A mi familia le enseñé cosas del pasado y del futuro y alteré el presente con ambos tiempos. Yo lo llamo “presenturo” (pasado, presente y futuro).Les enseñé a manejar la tecnología, a hacer libros, ropa moderna, obtener luz a base de electricidad y abrí una escuela en donde enseño cosas del pasado, del presente y del futuro.
Somos multimillonarios, tengo muchos autos y celulares. Sigo viajando en el tiempo, visito a mi familia del pasado, a la del presente y a la del futuro. Me considero un viajero del tiempo, además un gran historiador y director de cine. Vos te preguntarás en dónde estoy ahora. Pues yo soy esa voz que está leyendo este cuento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario