domingo, 9 de octubre de 2016

A mi mujer Por Carlos Cabrera

Si por quererte tanto como quiero,
tengo que soportar el sufrimiento,
quiero seguir, queriéndote contento
de este amor, que por querer, prefiero.

A veces, sin querer, soy tan sincero,
que te lastimo; por estar queriendo
que tú me quieras como yo, sabiendo
que querer es poder. Por eso quiero.

Si yo supiera, pero es que no puedo
saber qué día, sin querer me muero,
por ti el amor ha de seguir viviendo

Puedes estar segura, que queriendo,
has de enterarte, que me fui sintiendo
¡No quedarme a quererte como quiero!

La Rueda Por Olga Tasca de Pardo

Dos mitades, unidas por los medios,
La rueda alisando el proceso.
De arrobo,
de dudas,
de probables quimeras.
Dos abrazos que se unen en un abrazo amante,
en las idas y vueltas.
¿Ilusión?
¿Sortilegio?
¿Mandaderos o amos?
Sentirse como pájaro libre pero con grillos puestos
a quietud,
Decepciones,
la rueda en su andar va aplastando los sueños.
Costumbre.
Indiferencia. Saber como ha llegado la finitud del tiempo.
Cada parte de rueda suda por su destino
con la marca indeleble del carruaje La Vida.
Hubo ayeres. No cede y entre giros y giros
un rezongo de faltas acaricia los rayos
que son un poco herrumbre, y otro poco, esperanza
Demasiadas flaquezas van mostrando su grito.

Un pájaro Por Jorge Dágata


A mi madre, que se durmió en el pasado
invierno y poco a poco la siento despertar

En el pasto acunado por el viento
blanco barco vacío tembloroso
velas anclas ausencia
cascarón de una huida

En el aire celeste y en la fronda
hurga las notas de la algarabía
o al cascarón de estrellas le pregunta
sobre nuestro destino.

(Para marchitarse apenas la pluma suave
y no basta una vida para el retorno).

ALGUNAS POESÍAS DE ANÍBAL BLASCO DE SU LIBRO “MADRUGADAS EVOCATIVAS”

LA  PARTIDA

Estoy sentado al lado de mis penas
sostienen mis manos, el vaso del olvido
hoy me acompañan las horas que he vivido
el sinsabor amargo de mis lágrimas

está conmigo, mi amiga, la nostalgia
y mi valija repleta de tristeza
sonríe pálida, con su boca entreabierta
donde se notan sus dientes de pobreza

la llenaré con sueños de viajero
la cerraré con las llaves del misterio
la tomaré con mis manos tan vencidas
y partiré en busca de lo eterno

dejando el mundo envidioso y egoísta
dejando el aire poblado de veneno
y las grietas de la tierra que sonrientes
se burlaron de mi y de mis sueños

y buscará en el cielo la esperanza
en el supremo intento
de encontrar un amigo que comprenda
el drama que cultivo aquí en mi pecho.


DONDE TE FUISTE

hoy ya no se, donde estás, ni donde vives
es un misterio que mi mente ignora
te busco y te recuerdo a todas horas
oh... dulce idilio de amor que te has perdido

en la tiniebla oscura de esta noche
me siento fracasado, ya vencido
porque tus ojos no encuentro vida mía
porque tus labios no oprimen ya los míos

te seguiré buscando por la vida
pues vivir sin ti, es un suplicio
que me arrastra en mi senda al sacrificio
de verter una lágrima sombría

mas si un día el destino nos enfrenta
y veo tu boca, sedienta de mentiras
yo seguiré por mi camino a tientas
olvidando que existes en la vida

pero si observo en tus ojos la sonrisa
del amor reflejado en tus pupilas
te querré tanto como antes te quería
y uniremos para siempre nuestras vidas.


ABISMO DE AMOR

Te vi pasar con mirada serena
con la alegría, reflejada en tu rostro
con la tibieza, de tus cabellos sueltos
como palomas, en busca de un reposo

me enamoré de tus ojos, tan tiernos
de tu cuerpo flexible y tan hermoso
de tus pupilas enfrentando los sueños
cual un abismo dorado y misterioso

ese abismo, de dicha, de nobleza
ante el mundo egoísta y ambicioso
ese abismo que media entre la noche
y el resplandor del día majestuoso

entre el mar y la tierra
entre los hombres
de este mundo egoísta y pernicioso

fue sólo un sueño de amor hecho cenizas
sólo una nube que pasa y no retorna
o al retornar, llega con sueños nuevos
con su alma renovada, dulce sombra

dulce sombra de ayer, de días hermosos
de sueños que quedaron apagados
ayer te vi pasar junto a otro hombre
y de mis sueños, realidad sólo ha quedado.



RESTAURANT   NOCTURNO

Restaurant, taciturno y melancólico 
de madrugadas grises de esperanzas 
ruido de platos, golpeteando las sienes 
como un murmullo de dicha o de nostalgias

madrugadas de frío, sofocadas 
por el calor ficticio de las copas 
un tocadiscos que en un rincón evoca
 las melodías de un tango ya cansado

cansado cual la vida y su camino 
ese camino incierto que enfrentamos 
cuando el día nos muestra sus promesas 
de los sueñas que nunca acariciamos

mostrador ya vacío, son las cinco 
tan solo algún bohemio en el estaño 
evoca las tristezas de la vida 
al surgir iracundo el desengaño

mesas desalineadas y vacías 
conversan con los vasos que han quedado 
inmóviles como -pensando en vano 
que la vida es más corta que los años

la heladera rugiente desafía
cual un grito de guerra fuerte y bravo
el silencio impenetrable de la noche
que es la amiga mas fiel que he acariciado

aunque cansados los focas fluorescentes
indiferentes siguen alumbrando
todo el salón, que con aire majestuoso
quiere ignorar el sentimiento humano.