domingo, 28 de julio de 2013

Mi perro – Por Carlos Obligado



¡Si te recuerdo! Con alegre brío,
de la ribera, bajo el sol temprano,
tras una rama que arrojó mi mano,
te desplomabas bullicioso al río.

Y era la gloria del nadar bravío,
y era el regreso, de la presa ufano...
¡Ya con mi edad feliz duermes lejano,
 inolvidable compañero mío!

Pero en mis días de quebranto,obscuros, 
a mí te llegas, con tus ojos puros
donde un anhelo compasivo flota;

Y un verde gajo, de ilusión florido,
al alma ofreces, con amor traído
del lago azul de la niñez remota.

8 comentarios:

  1. De repenpe vino a mi mente esta poesía de mis días de infancia. La busqué porque no la recordaba completa...bella

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  2. es algo tan autentico, me lleva de nuevo a los 14 años, gracias

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  3. También a mí, que emotiva. Éste es un recuerdo que vuelve desde la niñez con una rama entre los dientes

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  4. La recuerdo de memoria desde mi infancia .Es un aire fresco entre tanta escritura tortuosa de hoy .

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  5. La memoricé allá por mis doce, cuando llevaba ya el recuerdo de algunas compañeras de vida. Pero una vez adulto perdí a mi gorda, una hija más. Y al enterrarla en un lugar que solíamos frecuentar, incluí este poema a modo de testigo de mis futuras melancolías.

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  6. Amo este poema desde que lo leí hace unos cuantos años.

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