Estaba enamorado. Se volvió ladrón, poeta y ladrón. Robó las palabras de tu poema.
Quería seducirla.
Borró tu nombre y él se vistió con la palabra de otro.
Recibió la recompensa.
¿Pensaste amor a cuántos sedujiste?
Esa joven te besa sin saberlo.
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