De este mito fascinador tiene la gente escaso conocimiento, aun cuando una corruptela de su nombre anda en boca de todo el mundo. Hablando de una región muy rica solemos decir que es otro "Eldorado" o bien "un Eldorado", error indigno de personas cultas. El verdadero nombre es "Dorado", y "El Dorado" es una contracción en español de "el hombre dorado", mito que ha dado origen a una serie de proezas, al lado de las cuales son insignificantes las de Jasón y sus compañeros semidioses. Como todos estos mitos, éste tuvo en realidad su fundamento ... Se puede ahora relatar esa historia de un modo inteligible.
Hace algunos años se halló en una laguna de Siecha, en Nueva Granada, un curioso y pequeño grupo de estatuas: era un trabajo tosco y antiguo de los indios, y aun más precioso por su interés etnológico que por el metal de que estaba hecho, que era de oro puro. Este raro ejemplar, que puede verse ahora en un museo de Berlín, es una balsa de oro, sobre la cual están agrupadas diez figuritas de hombres del mismo metal. Representa una extraña costumbre que en tiempos prehistóricos era peculiar de los indios de Guatavita, en los montañas de Nueva Granada.
Esa costumbre era como sigue: en cierto día uno de los jefes de la aldea untaba su cuerpo desnudo con una goma, y después se espolvoreaba de la cabeza a los pies con oro fino molido. Ése era "el hombre dorado" Entonces lo llevaban sus compañeros en una balsa hasta el centro del lago, que estaba cerca de la aldea, y saltando de la balsa, el hombre dorado se lavaba de su preciosa y extraña envoltura y la dejaba hundirse hasta el fondo del lago. Esa práctica era un sacrificio en provecho de la aldea.
La tal costumbre ha quedado históricamente comprobada; pero se había abandonado más de treinta años antes que se enterasen de ella los europeos, esto es, los españoles de Venezuela en 1527. La historia de "el hombre dorado", que por contracción se decía "eldorado", era demasiado sorprendente para no causar impresión. Llegó a ser una palabra familiar, y desde entonces un señuelo para cuantos se acercaban a la costa del norte de la América del Sur
De: “Los exploradores españoles del siglo XVI en América”, 1" edición.
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