¡Ah, golondrina mía, con revuelos en vena!
Con el barco velero diste tu despedida
se levaron tus anclas con pañuelos de pena
cruzándose intangibles besos en estampida
Y se fueron los sueños con añoranza en vela
por la ruta singlada de esperanza perdida
¡Ah golondrina mía con temores recela!
El dudoso regreso con hora suspendida
Irradiaste saudades por la senda ataviada
de nardos y azucenas, jazmines y azahares
¡Salpicaron tus lluvias, con nácares y espumas!
Reclamando en rincones, reclamando por brumas
caricias de mi otoño, surgidas por azares
de un poema en tus tardes, con letra enamorada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario